El acceso a Rideporcos se hace por un elegante puente colgante que cimbla...
De camino a Bustelín
Vista de Bustelín, confundido entre los árboles
El río Bustelín y su puente
Corripa para almacenar las castañas
Nuestra primera intención era hacer la ruta completa (Riodeporcos-Peneda-Penedela-Busto), pero fueron pasando los días y la intención meguó (Riodeporcos-Busto), y cuando llegó el día de autos nos equivocamos de camino y tuvimos que hacer un apaño.
Para llegar a Riodeporcos hay que salir de Asturias y entrar por Galicia; después, una pista de tierra nos acerca al puente colgante por el que sólo se puede pasar a pie. Llegados al final del pueblo tiramos camino alante por un camino ancho y bien definido. Mal. Hora y media después de arrastrarnos cuesta arriba bajo un sol de justicia y un calorazo tremendo, el Sr. Entomólogo encendió el gepese para descubrir que íbamos camino de Sena... así que desandamos lo andado y empezamos de nuevo. Pero, claro, como para hacer ninguna ruta a aquellas horas y con aquel calor. Nos conformamos con llegar hasta el río Bustelín, meter los pies a remojo y, después, seguir hasta el punto donde se bifurca la ruta: hacia la derecha a Peneda y hacia la izquiera a Busto... En otra ocasión será.
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