La iglesia de Sanmartino es de una sola nave, rematada en un ábside semicircular precedido de un tramo recto.
Sufrió muchas reformas a lo largo de su historia, aunque fue la
realizada en el siglo XIX la que más la transformó, al incluir la
construcción de la espadaña, dos capillas laterales y dos sacristías.
La portada es un arco de medio punto con dos roscas sin decorar sobre impostas.
El tejaroz reposa en 6 canecillos con una metopa central.
Sobre la portada aparecen tres canecillos, uno de los cuales (el izquierdo) hace referencia al Buen Pastor. Este canecillo representa a Jesús con un cordero a la espalda, como alegoría de la salvación de las almas cristianas.
Las impostas están decoradas con cabezas de clavo y los capiteles con hojas lanceoladas con volutas (el izquierdo) y hojas de palma (el derecho).
Las paredes del interior del ábside están decoradas con pinturas que representan a cuatro parejas de santos. Su datación es de fecha desconocida.
La cornisa de la cubierta del ábside se apoya en canecillos, muchos de ellos retirado por obscenos y sustituidos por otros durante la reforma efectuada en el siglo XIX.
Pertenenciente a la parroquia de Villallana, Samartino está situado cerca de un ramal de la vía romana de La Carisa.
La primera noticia que se tiene de esta localidad data del año 905, cuando es donada por Alfonso III a la iglesia de San Salvador de Oviedo. Sin embargo, la iglesia de Sanmartino fue construida en el siglo XIII, lo que hace suponer que su construcción se hizo sobre otra anterior prerrománica, de la que no queda ningún resto.
Fue declarada Bien de Interés Cultural en 1982.
(San Martino es lugar de la parroquia de Villallana en el concejo de Lena)
Según Luciano Castañón, sus habitantes son conocidos como "gatos".
"El que no diga chino, chana, non ye de Vichachana".
"Villallana ni es villa ni es llana".
No hay comentarios:
Publicar un comentario