La fundación del monasterio se remonta al siglo XIII, aunque de todo el conjunto medieval sólo se conserva la iglesia.
A pesar de que la comunidad monástica de Santa María La Real de Obona acataba la regla de San Benito, sigue la estética cisterciense de ausencia de ornamentación.
La portada está formada por cuatro arquivoltas con arcos de medio punto que se apoyan en cuatro columnas a cada lado. Sobre la portada, un tejaroz con canecillos desornamentados.
Está formada por tres naves, más desarrollada la central que las laterales, desembocando cada una de ellas en un ábside semicircular.
El ábside central está precedido de un tramo recto cubierto por bóveda de cañón, rematado en un semicírculo cerrado con bóveda de cuarto de esfera.
El retablo mayor, del siglo XVII, cuenta con la siguiente leyenda:
Año de 1622 siendo abad fray Duran
Santo Cristo de Obona
Imagen románica original de Cristo, de tipología siria: con barba, un paño de pureza y los pies separados. La figura sigue los ejes que conforman los dos maderos de la cruz, como representación del árbol de la vida.
Toda la decoración se centra en los capiteles y en las basas, con motivos vegetales muy esquemáticos.
Ábsides laterales.
Tanto el altar como la pila bautismal, son de la época de la fundación del monasterio. El altar es una gran losa de piedra sustentada sobre cuatro columnillas y un pilar-relicario central. La decoración de los capiteles es vegetal.
La pila bautismal es una copa de piedra caliza sobre una columna cilíndrica. Su única decoración consiste en una fina moldura que recorre toda su circunferencia.
Retrato del príncipe Adelgaster:
Este es el príncipe que dice ser hijo del Rey Silo,
fundador de esta casa en el año 781.
Sepulcro con la inscripción:
Aquí están los huesos del Príncipe Adelgaster,
hijo del rey Silo de León
y de doña Brunildi su muger,
los cuales fundaron esta casa en el año 781
Se trasladaron a este puesto del medio de esta capilla mayor
en 8 de abril de 1656
El ruinoso clausto del monasterio está adosado al muro sur de la iglesia.
Construido en época barroca, sustituyó al original románico.
Casa abacial.
De época barroca, tiene dos sencillos arcos rebajados.
Sobre el escudo de Castilla y León, una ornacina con la imagen de San Benito, y bajo él se puede leer la siguiente inscripción:
Aldegaster, hijo del rey Silo me fundó. Año de 781.
Reedificome el de 1659.
Exterior del ábside central.
Las cornisas están decoradas con una hilera de bolas, mientras que los canecillos carecen de ornamentación.
Los capiteles se decoran con motivos vegetales: tallos, frutos y hojas de acanto.
Altar exterior.
Cuenta la tradición que el monasterio fue fundado en el siglo VIII por Aldegaster, supuesto hijo bastardo del rey Silo, y su mujer Brunilda. Aunque no se ha constatado tal hecho, sí es posible que tenga su origen en un monasterio familiar, absorvido en el siglo XI por el monasterio de Corias.
En el siglo XII, se convierte exclusivamente en cenobio masculino y acata la regla de San Benito, recibiendo privilegios de los reyes Fernando II y Alfonso IX, siendo este último el que convierte a Obona en paso obligado para los peregrinos que se dirigen a Compostela a cambio de que el monasterio de cobijo a peregrinos y caminantes.
En Obona, "agua buena" mana una fuente, la fuente del Matoxo, con tales propiedades, que el Padre Feijoo se hacía llegar el agua a Oviedo en cántaros especiales para que no se pudiera adulterar.. según escribió Constantino Cabal.
A pie de caleya: el día que fuimos al monasterio no había luz porque habían quitado los ¡plomos!. No sé si es algo habitual o fue pura casualidad, así que deberéis tenerlo en cuenta si váis a pasar por allí.
Una iluminación impresionante la de la iglesia, típica de esa orden religiosa, por lo que se lee: "No es el color lo que anima la arquitectura cisterciense, sino la luz. Dios es luz; Cristo es la Luz del mundo".
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