En este solar de Pelúgano (Aller) nació Gontrodo Petri
Torre de Soto (Aller)
Capilla de Santa Bárbara en la Fábrica de Armas de Oviedo.
Detalle de una de las dos portadas románicas que se conservan del monasterio
de Santa María de la Vega.
Se compone de tres arquivoltas semicirculares con guardapolvo. Las dos exteriores son lisas, mientras que la interior está formada por arquillos enfilados de estilo califal.
Los capiteles se ornamentan con bolas, tallos entrelazados y otros motivos vegetales.
Se compone de tres arquivoltas semicirculares con guardapolvo. Las dos exteriores son lisas, mientras que la interior está formada por arquillos enfilados de estilo califal.
Los capiteles se ornamentan con bolas, tallos entrelazados y otros motivos vegetales.
Sarcófago de Gontrodo Petri, tallado en caliza.
Aquí yace la sierva de Dios, Gontrodo.
En la era de MCCXXIIII
(año 1186)
Lauda de Gontrodo Petri.
¡Oh muerte, justa en exceso y que no entiendes de piedad con nadie. Si hubieses sido menos justa, hubieras parecido más ecuánime; equiparas a Gontrodo con las demás, siéndoles ellas inferiores en méritos. Excesivamente justa, perjudicas a aquella a quien más miramiento debes. Sin embargo, ella no muere, sino que mediante tu intervención revive la esperanza, el ornato, el espejo de un linaje, de la patria, de la mujer. No muere Gontrodo, se ausentó; muere esto invisible, ella está oculta. Se incrementaron sus méritos, al abandonar a los hombres y el mundo, al aceptar morir al mundo; con la muerte se deparó a sí misma la vida. Mil y dos veces cien, más cuatro veces seis dan la era.
(era 1224=año 1186)
En 1845 se abrió su sepulcro
y los restos óseos se depositaron en una urna en el convento de San Pelayo.
El monasterio de Santa María de la Vega fue levantado en el siglo XII sobre el conjunto palatino de Alfonso II,
extramuros de la ciudad de Oviedo, por Gontrodo Petri, nacida en Pelúgano en el año 1110, aunque buena parte de su vida transcurrió en Soto de Aller. Era hija de Pedro Díaz y de
María Ordóñez, y bisnieta de Alfonso V.
En 1130,
Gontrodo, casada con Gutierre
Estébaniz y madre de tres hijos, conoce al rey Alfonso VII cuando Pedro Díaz, que se había levantado en armas contra el rey, es derrotado por éste y se ve obligado a prestar juramento de lealtad y vasallaje, y a seguirlo en la campaña bélica que emprende para sofocar la rebelión
del conde Gonzalo Peláiz en la zona central de Asturias.
Alfonso VII se
instala en la torre de Soto, lugar de residencia de Pedro Díaz, para planificar
la batalla contra el conde insurgente, e inicia una relación de concubinato
con Gontrodo, de la que nacerá en 1132 una hija, Urraca, que llegará a ser reina
de Navarra. Al poco de nacer, el rey se lleva a la niña y la deja bajo la tutela de
su hermana Sancha, y ambas no volverán a verse hasta el matrimonio de Urraca,
que tenía 11 años de edad, con el rey García Ramírez IV de Navarra en 1144.
En el año 1153, Gontrodo
decide profesar la vida religiosa fundando un monasterio bajo la advocación de
Santa María Madre de Dios, en el lugar conocido como La Vega, y al que el rey
Alfonso dotó de tierras y beneficios. Fundacionalmente, el monasterio estuvo
sometido a la Congregación de Fontenvrault, de Roberto de Arbrissel, que seguía
la regla de San Benito.
Gontrodo vivió en el monasterio de La Vega, del que fue abadesa, hasta su muerte en el año 1186, momento en el que pasó a manos de las monjas benedictinas. Ya en
1854, Carlos IV ordenó la
construcción en
ese mismo solar la Real Fábrica de
Armas, que estuvo en funcionamiento hasta 2013.
Del antiguo monasterio sólo se conservan dos de las tres portadas, así como el sepulcro de Gontrodo y su epitafio. El templo fue derruido en el siglo XVII para construir una nueva iglesia, demolida en 1917. Las dos portadas que sobrevivieron se integraron en la capilla de Santa Bárbara que construyó Menéndez Pidal en 1926 dentro del recinto de la Fábrica de Armas de Oviedo, siguiendo el estilo románico.
Del antiguo monasterio sólo se conservan dos de las tres portadas, así como el sepulcro de Gontrodo y su epitafio. El templo fue derruido en el siglo XVII para construir una nueva iglesia, demolida en 1917. Las dos portadas que sobrevivieron se integraron en la capilla de Santa Bárbara que construyó Menéndez Pidal en 1926 dentro del recinto de la Fábrica de Armas de Oviedo, siguiendo el estilo románico.
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