Construida a principios del siglo XIII, es de nave única cubierta con armadura de madera y cabecera cuadrada con bóveda de cañón apuntado, según los principios arquitectónicos del románico de la època, caracterizado por la sencillez y la simplificación.
La portada meridional es de gran sencillez. Está compuesta por un sencillo arco de medio punto con guardapolvo decorado con medios círculos enfilados.
Arco triunfal.
Capiteles del lado derecho del arco triunfal.
Capiteles del lado izquierdo del arco triunfal.
Además de los motivos vegetales, en los capiteles del arco triunfal se puede ver la imagen de dos músicos (un hombre y una mujer que toca el pandero cuadrado); un hombre con un libro abierto; dos leones que devoran a un hombre por los pies (símbolo del pecador); y una pareja de aves que picotean una hoja (símbolo de la redención)
El altar está adosado al testero y es de la misma época que la iglesia.
El templo está realizado en aparejo de cantería, lo que no era muy frecuente en las construcciones rurales. Este hecho fue determinante para que se convirtiera en una de las iglesias mejor conservadas y menos intervenida de la región.
La portada occidental destaca sobre el muro y está resguardada por un tejaroz. Está compuesta por un arco de medio punto con tres arquivoltas y guardapolvo, todo ello muy decorado.
Entre los capiteles de la portada oeste destaca una escena de cacería de un jabalí y el martirio de San Esteban (lado derecho), que fue apedreado. En la jamba izquierda predominan los capiteles con ornamentación vegetal y en otro se puede ver la figura de una lechuza.
Los canecillos del tejaroz representan figuras humanas, completandose la decoración con una serie de metopas intercaladas entre ellos.
La pila bautismal, también contemporánea de la iglesia, es cuadrada y está desornamentada.
Primitiva pila de agua bendita.
La ventana absidal está formada por una arquivolta con guardapolvo decorado con bocel, zigzag y rosetas tetrapétalas. Se dispone sobre dos columnillas de fuste monolítico y capiteles vegetales.
La iglesia de Santa Eulalia de la Lloraza aparece citada por primera vez en el siglo XIV, en la Nómina de parroquias de la diócesis de Oviedo, elaborada entre 1485 y1386. El templo estaba vinculado al hospital de leprosos levantado entre los siglos XII y XIII en las cercanías, estando activo hasta el siglo XVIII.
Para visitar la iglesia hay que contactar con Doña Oliva, que vive en una casa cercana. Hace la visita guiada y es todo un placer, porque lo sabe todo sobre la iglesia. Es genial.
(Santa Eulalia de la Lloraza pertenece a la parroquia de Oles, en el concejo de Villaviciosa)
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